domingo, 27 de septiembre de 2015

ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LA NOVELA HASTA EL SIGLO XVIII

Categoría (El libro y la lecturaGeneral) por Manu de Ordoñana, Ana Merino y Ane Mayoz el 26-09-2015
COPIADO DEL BLOG SER ESCRITOR de Manu de Ordoñana

Las novelas, esos libros que tanto nos han hecho vibrar a lo largo de nuestra vida, han tenido un largo devenir. Se le considera el más tardío de todos los géneros literarios, puesto que no logró implantarse hasta la Edad Media.
En cuanto a su etimología, proviene de la palabra italiana novella (relato de ficción intermedio entre el cuento y el romanzo o narración extensa); ésta, a su vez, de la forma femenina latina novellus, cuyo significado sería “novedoso”. El término novela, que en tiempos de Cervantes mantuvo su acepción original de “relato breve”, posteriormente servirá para designar la narración extensa (en francés, roman), mientras que el relato breve será denominado novela corta.
El origen de lo que luego denominaremos novela lo encontramos entre los siglos II a.C. y III d.C. en Grecia y Roma, aunque existen, con anterioridad, largos relatos narrativos en verso propios de tradiciones orales como la sumeria y la hindú. Las primeras manifestaciones de muchos de los géneros literarios que más tarde aparecerían en Occidente se dieron en la literatura oriental, en especial, en lengua sánscrita.
El primer texto indio que cabe considerar como precursor de la novela es, quizá, Cuentos de diez príncipes, un romance en prosa de Dandin, escritor en sánscrito de finales del siglo VI d.C. La primera novela psicológica más antigua de la literatura universal y la más importante de la literatura japonesa clásica es el relato Genji Monogatari (siglo XI), de la escritora Murasaki Shikibu.
En Grecia con Homero y en Roma con Virgilio ─autor de la Eneida─ se puede hablar de las primeras ficciones en prosa; la ficción, uno de los ingredientes de la fórmula mágica de la literariedad, ese elemento indispensable que convierte un texto en literatura.
En la época del imperio romano aparecen las inaugurales manifestaciones escritas en latín y dignas de tal nombre son el Satiricón, la primera novela gay de la historia, atribuida a Petronio (siglo I d.C.) y el Asno de oro de Apuleyo (siglo II d.C.), considerada como una de las joyas de la literatura universal.
Pero es en Grecia donde encontramos las primeras narraciones de verdaderas aventuras épicas, como las creadas por Homero (la Iliada y la Odisea) y que dan origen al género. Después de esto, la épica ha evolucionado en dos direcciones. Primero de una forma estructural, puesto que de ser un género narrativo escrito en verso pasó a ser un género escrito en prosa, la novela. Segundo, en cuanto al contenido, ya que deja de centrarse en los mitos y valores del mundo antiguo (el valor, la virtud, el heroísmo) para ser reemplazado por el mundo novelesco, cargado de otros valores (libertad, individualidad, subjetividad).
En definitiva, la unión de la épica y la novela se manifiesta en la representación de un mundo repleto de elementos (ideas, personajes, valores, tipos de mundo, etc.), con una perspectiva temporal que favorece la narración en pasado y cuyo contenido se alimenta de los recuerdos contados y transmitidos por la tradición sobre los héroes legendarios y sus proezas.
Ya desde los griegos nos viene la clasificación de la novela en cuatro tipos básicos: novelas de viajes (Vida y Hazañas de Alejandro de Macedonia de Pseudo-Calístenes), amorosas (Dafnis y Cloe de Longo), satíricas (Satiricón de Petronio o El Asno de oro de Apuleyo) y bizantinas (Historia de Apolonio rey de Tiro).
Llegamos pues a la Edad Media donde podemos encontrar, junto a relatos de novela corta, nuevos modelos de narración extensa, como la novela sentimental y la caballeresca. Esta última surgió con afán de aventuras y como alternativa fantasiosa para aquellos que no podían recorrer la geografía descubriendo aventuras. Los libros de caballerías son las primeras obras puramente novelescas, escritas en prosa y ficcionales.
La narrativa medieval fue poesía épica cantada por los juglares. A partir del siglo XIII se fue creando en Europa la narrativa en prosa. Quizás las tres primeras obras que se pueden llamar novelas aparecieron en España: el Libro de Buen AmorLa Celestina y El Conde de Lucanor, aunque la primera está escrita en verso, y la segunda, escrita en 1499, es de difícil catalogación: ¿obra dramática o novela dialogada?
A comienzos del XVI, aparece uno de los libros más famosos de caballerías: Amadís de Gaula. También germinan otros géneros novelescos a mediados de este mismo siglo como la primera novela pastoril Los siete libros de Diana, publicada en España hacia 1559 que fue, continuación de la novela sentimental; y la primera novela morisca: Historia del Abencerraje y de la hermosa Jarifa (1551). Estas obras, típicamente españolas, narran las peripecias entre cristianos y moros durante la Reconquista.
Pero el género más importante nacido en España, es el picaresco. Se dice que La vida de Lazarillo de Tormes (1554) es el comienzo de una crítica de los valores dominantes y que contiene características de la novela moderna: narra una vida que va haciéndose contada por el propio personaje.
Y finalmente, llegamos a la obra cumbre de la literatura universal. El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha (1615) está considerada como la primera novela moderna, mezclando realismo y ficción para desmitificar la tradición caballeresca mediante un tratamiento burlesco. Y también como la primera novela polifónica, dando voz a distintos narradores que interpretan la realidad desde distintos puntos de vista.
Hasta el siglo XVIII la novela constituye un género literario desprestigiado en todos los aspectos. Aunque el arte de narrar era conocido desde mucho antes, la novela se conceptuaba como frívola, se la consideraba un peligroso elemento de perturbación pasional y de corrupción de las buenas costumbres, cultivada por espíritus inferiores y apreciada por lectores poco exigentes en materia de cultura literaria.
Comienza a afirmarse un nuevo público (nuevos gustos, nuevas exigencias espirituales) y la novela experimenta una metamorfosis y un desarrollo muy profundo. A partir del siglo XVIII se habla de una tradición novelística, se revestirá de nuevas formas, nuevos contenidos…

domingo, 20 de septiembre de 2015

74 LIBROS QUE FASCINARON A JORGE LUIS BORGES



Quiero compartir con los seguidores del maestro Jorge Luis Borges  este listado de libros que eran de su agrado
Julio Cortázar: Cuentos
Evangelios apócrifos
 Franz Kafka: América. / Relatos breves
Gilbert Keith Chesterton: La cruz azul y otros cuentos
Maurice Maeterlinck: La inteligencia de las flores
Dino Buzzati: El desierto de los tártaros
 Henrik Ibsen: Peer Gynt / Hedda Glaber
José María Eça de Queiroz: El mandarín
 Leopoldo Lugones: El imperio jesuítico
 André Gide: Los monederos falsos
 Herbert George Wells: La máquina del tiempo / El hombre invisible
 Robert Graves: Los mitos griegos
Fiodor Dostoievski: Los demonios
 Edward Kasner & James Newman: Matemáticas e imaginación
Eugene O’Neill: El gran dios Brown / Extraño interludio
 Herman Melville: Benito Cereno / Bily Budd / Bartleby, el escribiente
Giovanni Papini: Lo trágico cotidiano / El piloto ciego / Palabras y sangre
Arthur Machen: Los tres impostores
Fray Luis de León: Cantar de cantares / Exposición del Libro de Job
Joseph Conrad: El corazón de las tinieblas / Con la soga al cuello
Oscar Wilde: Ensayos y diálogos
Henri Michaux: Un bárbaro en Asia
Hermann Hesse: El juego de los abalorios
Enoch A. Bennett: Enterrado en vida
Claudio Eliano: Historia de los animales
Thorstein Veblen: Teoría de la clase ociosa
Gustave Flaubert: Las tentaciones de San Antonio
Marco Polo: La descripción del mundo
Marcel Schwob: Vidas imaginarias
George Bernard Shaw: César y Cleopatra / La comandante Bárbara / Cándida

“UNO LLEGA A SER GRANDE POR LO QUE LEE Y NO POR LO QUE ESCRIBE.”

Francisco Quevedo: La Fortuna con seso y la hora de todos / Marco Bruto
Eden Phillpotts: Los rojos Redmayne
Sóren Kierkegaard: Temor y temblor
Gustav Meyrink: El Golem
Henry James: La lección del maestro / La vida privada / La figura en la alfombra
Heródoto: Los nueve libros de la Historia
Juan Rulfo: Pedro Páramo
Rudyard Kipling: Relatos
Daniel Defoe: Moll Flanders
Jean Cocteau: El secreto profesional y otros textos
Thomas de Quincey: Los últimos días de Emmanuel Kant y otros escritos
 Ramón Gómez de la Serna: Prólogo a la obra de Silverio Lanza
 Antoine Galland: Las mil y una noches (selección)
 Robert Louis Stevenson: Las nuevas noches árabes
León Bloy: La salvación por los judíos / La sangre del pobre / En las tinieblas
Bhagavad-Gita: Poema de Gilgamesh
Juan José Arreola: Cuentos fantásticos
David Garnett: De dama a zorro. Un hombre en el zoológico. La vuelta del marinero
Jonathan Swíft: Viajes de Gulliver
Paul Groussac: Crítica literaria
 Manuel Mujica Láinez: Los ídolos
 Juan Ruiz: Libro de buen amor
William Blake: Poesía completa
 Hugh Walpole: En la plaza oscura
 Ezequiel Martínez Estrada: Obra poética
 Edgar Allan Poe: Cuentos
Publio Virgilio Marón: La Eneida
Voltaire: Cuentos
J. W Dunne: Un experimento con el tiempo
Attilio Momigliano: Ensayo sobre el Orlando Furioso.
William James: Las variedades de la experiencia religiosa / Estudio sobre la naturaleza humana
 Snorri Sturluson: Saga de Egil Skallagrimsson

 FUENTE:  http://www.faena.com/


sábado, 19 de septiembre de 2015

LOS 200 CUENTOS BREVES DE KARL KRISPIN



El hermano de Ciento breve (2005) será presentado el domingo 27 de septiembre en la Asociación Cultural Humboldt
Un libro personal, 200 minicuentos de 100 palabras que ya está siendo distribuido en todo el país, 200 historias que revelan anécdotas, notas curiosas, analogías… así son los 200 breves de Karl Krispin y Oscar Todtmann Editores, que será presentado el próximo 27 de septiembre en la Asociación Cultural Humboldt.
Caraqueño (1960), escritor, profesor, articulista, ensayista e investigador, Karl Krispin ha publicado a lo largo de su vida diversas obras entre las que destacan La revolución Libertadora (1990), Viernes a eso de las nueve (1992), Golpe de Estado Venezuela 1945-1948 (1994), Camino de humores (1998), Alemania y Venezuela 20 testimonios (2005), Con la urbe al cuello (2005), Lecturas y deslecturas (2009), y La advertencia del ciudadano Norton (2010).
Sin embargo, fascinado por los minicuentos desde hace 15 años gracias al concurso organizado por la revista colombianaEl Malpensante (donde participó), no para de escribirlos. En el 2005 publicó Ciento breves y diez años más tarde sorprende con el doble de mini-historias que revelan su ahínco y su pasión por este género literario. “Bastarán al menos 100 palabras para sentirme contento urdiendo literariamente una historia”…
-¿Qué le inspiró a escribir micro relatos?
El verbo inspirar me da la impresión de que debería ser desterrado del diccionario personal de los escritores ya que obedece a una concepción romántica superada del artista entregado a una musa, o poseído por un demiurgo creador, o en todo caso una condición biorrítmica favorable. Nada de eso existe a la hora de escribir que no es más que un proceso disciplinado de asumir un proceso creativo que tiene unas pautas estrictas de trabajo. Lo digo en la presentación de mi libro Ciento breve, cien minicuentos de 100 palabras publicado en 2005: en el año 2000 la revista El malpensante de Colombia convocó un concurso de minicuentos cuya extensión no debía sobrepasar las cien palabras. Compuse unos varios, los envié, ni gané y hasta me contestaron como suele hacer El malpensante con la peor mala voluntad que normalmente tienen, pero me quedó la fijación de componer minicuentos de 100 palabras, de exactamente 100 palabras. Producto de ello en un lapso de unos 15 años es Ciento breve y ahora 200 breves. De otra parte la fijación reveló igualmente gusto y placer por las posibilidades que otorga en sí el minicuento.
-¿Qué aspectos abarcan los 200 breves? ¿Parte de hechos reales?
Aquí hay toda una discusión de la literatura en general, acerca de la dimensión misma de la literatura. Todo parte de la realidad. Ser escritor es un hecho real fijado en el tiempo y en el espacio. Una historia puede despegar de la realidad, de hecho es siempre así en cuanto los escritores somos reales y no unos hologramas o unos plasmas que flotan en los techos. Hay una conciencia estricta de realidad pero por más que esa historia arranque desde la realidad una vez que entra en el terreno de la literatura desdice y abjura de la misma realidad porque entra en una dimensión donde la propia palabra traiciona lo que de objetivo encierra la realidad trasladándose a lo imaginativo, que es la forma más elevada y respetable de la mentira, también conocida eufemísticamente como la ficción. En 200 breves hay muchas situaciones que han partido de la realidad, incluso de mi vida misma, hasta me atrevería a decir que es uno de los libros más personales que he escrito, cosa que no debe importarle demasiado al lector ni a mí me importa mucho que no le importe. Pero una vez, repito, que se meten en la piel de la literatura o en los papeles de la literatura ya cobran un aspecto más relacionado con lo mental-abstracto que con lo real.
– ¿Cómo construye un hecho en 100 palabras?
Un hecho se construye en 100 palabras o en mil o en siete que es el número de palabras de su pregunta, que por lo demás constituye el hecho de su pregunta. Hay hechos, o historias o situaciones que requerirán de mayores o menores explicaciones. Me gusta pensar en este teorema arbitrario de que bastarán al menos 100 palabras para sentirme contento urdiendo literariamente una historia.
– ¿Menos es más?
Gracián tiene aquella frase citada muchas veces que de lo bueno, si breve mejor. Tampoco podemos matricularnos en el reduccionismo. El minicuento tiene algo que lo caracteriza maravillosamente bien: la narración llega hasta un punto y existe en el hecho de su lectura una suerte de completación (palabra horrorosa por cierto) de parte de quien lo lee, que también será arbitraria según cada quien. El escritor deja unas pistas para que tal vez alguien complete un mapa o una geografía de los hechos sugeridos. El minicuento siempre juega a descompletar las piezas lo cual no significa necesariamente que sea más o que sea mejor. Los juegos siempre son así: en definitiva el autor establece unas premisas y hasta las anuncia para que haya unos participantes llamados lectores.
– ¿Qué significa para usted la literatura?
Es uno de los pocos sentidos que ha tenido mi vida o uno de sus sentidos más duraderos en relación a que quedará como una pieza de recuerdo, una huella dactilar personal de mi paso por este incomprensible mundo. La literatura ha terminado fijándome hasta un destino. Es la forma que tengo para ser, tal vez la única.

– ¿Qué es lo que más disfruta de escribir? ¿Tiene algún tipo de rutina?
Lo que más disfruto de escribir es escribir. Nunca he creído en esas víctimas de la literatura, escritores que hablan del dolor del mundo y otros recursos de la parafernalia del escritor sufrido, un alma frágil sostenida por la palabra. Es una versión bastante tuberculótica de la vida y de la escritura. Esos escritores fracturados, escindidos, lacerados. Qué cosa tan petulante y tan peligrosa porque hasta cometen suicidios. A mí me divierte muchísimo escribir, me lo paso muy bien haciéndolo tratando de mentir y especialmente tomándole el pelo a los demás hasta en las situaciones serias y duras que puedo escribir. En el fondo de todo hay un escritor muerto de la risa que puede abandonar todo menos el humor, aunque prescinda de él. A Juan Carlos Onetti le preguntaron sobre sus rutinas escriturales y respondió con una frase de la que me he apropiado porque nadie lo ha dicho mejor: “La hora de escribir es la hora de escribir”.
– ¿Qué es lo más difícil de ser escritor?
Lo más difícil de ser escritor es escribir, una vez más, sobre todo escribir algo que te convenza y no destruyas. Algo que puedas leer cuando esté publicado y te dé algo de orgullo secreto, de que esa frase la pensaste alguna vez y pudiste darle vida. A pesar de que no pensemos en los lectores ya que quienes hacemos literatura nunca pensamos en un lector tipo o modelo. Ello nos llevaría al despreciable terreno de los gerentes de mercadeo a quienes nunca me cansaré de desacreditar, en que se escribe para hacer dinero. Si bien no pensamos ni consideramos a los lectores, nos gusta que nos lean y para eso hay que saber escribir la literatura destinada a ese placer personal e intransferible de saber que alguien está ante nuestras frases con algún sentido de compañerismo tácito. Los lectores se hacen amigos de los escritores en una dimensión privada y también intransferible desde el punto de vista del lector. Realmente lo más difícil de ser escritor está en cubrir la hoja blanca con una historia que podamos admitir y reconocer, de la que no nos arrepintamos. Por lo demás esa satisfacción será siempre parcial y nos pasaremos la vida compitiendo contra nosotros mismos.
– ¿Qué otro género le gustaría explorar?
He escrito novelas, cuentos, crónicas, ensayos, artículos y minicuentos.  Hasta los veintisiete años me atreví a escribir poesía y la mandé toda al cesto de la basura que era el sitio que merecía.  De modo que lo que restaría sería escribir teatro cosa que jamás haré.  Aparte de mi actividad rutinaria de escritor de artículos para la prensa, estoy muy contento con ese trípode novela-ensayo-minicuento con el que pienso permanecer sin ensayar ninguna novedad adicional.
– ¿Qué prepara para los 300?
Me encanta esta pregunta porque me condena al fatalismo de tener que vérmelas con 300 breves algún día. Habrá que preguntárselo al narrador que anda entretenido con su cuarta novela y se malhumora cuando le llaman la atención sobre ese proyecto actual que le parece difícil, y con el cual está luchando aunque se esté divirtiendo porque de lo que se trata como dijimos es poder presentar algo que no nos desengañe y que hasta llevará nuestro nombre en una tapa. Que para eso es la literatura.
Colaboración de @DanielaFeblesM

viernes, 18 de septiembre de 2015

LAS FRASES QUE MAS SE SUBRAYAN EN EL QUIJOTE




Un eBook nos ofrece un gran número de ventajas frente a los libros en formato físico  y por ejemplo nos permite conocer, entre otras muchas cosas, las frases más subrayadas en un libro concreto. También es posible la cantidad exacta de libros que se venden o que tipos de usuarios lo compran. Todos estos datos por supuesto se pueden recoger siempre que los lectores lo permitan y se identifiquen.
Hace ya algunos meses conocimos las frases más subrayadas a nivel mundial en un Kindle y hoy podemos conocer lasfrases que los usuarios destacan una mayor cantidad de veces en El Quijote, uno de los libros referencia de la literatura española.
Una vez más estas frases más subrayadas han sido publicadas por Amazon España con motivo de los 400 años que se cumplen desde la publicación de la segunda parte de las hazañas de Don Quijote de la Mancha y Sancho Panza. A continuación os mostramos la 10 frases que más lectores reseñan en la obra de Miguel de Cervantes;
“La razón de la sinrazón que a mi razón se hace, de tal manera mi razón enflaquece, que con razón me quejo de la vuestra fermosura”
“Porque el caballero andante sin amores era árbol sin hojas y sin fruto y cuerpo sin alma”
“En resolución, él se enfrascó tanto en su lectura, que se le pasaban las noches leyendo de claro en claro, y los días de turbio en turbio; y así, del poco dormir y del mucho leer, se le secó el celebro, de manera que vino a perder el juicio”
“…los altos cielos que de vuestra divinidad divinamente con las estrellas os fortifican, y os hacen merecedora del merecimiento que merece la vuestra grandeza”
“Ésa es natural condición de mujeres —dijo don Quijote—: desdeñar a quien las quiere y amar a quien las aborrece”
“Y, lo que sería peor, hacerse poeta; que, según dicen, es enfermedad incurable y pegadiza”
“Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza”
“Acontece tener un padre un hijo feo y sin gracia alguna, y el amor que le tiene le pone una venda en los ojos para que no vea sus faltas, antes las juzga por discreciones y lindezas y las cuenta a sus amigos por agudezas y donaires”
“Desocupado lector: sin juramento me podrás creer que quisiera que este libro, como hijo del entendimiento, fuera el más hermoso, el más gallardo y más discreto que pudiera imaginarse”
“La Galatea, de Miguel de Cervantes —dijo el barbero. — Muchos años ha que es grande amigo mío ese Cervantes, y sé que es más versado en desdichas que en versos. Su libro tiene algo de buena invención; propone algo, y no concluye nada: es menester esperar la segunda parte que promete; quizá con la enmienda alcanzará del todo la misericordia que ahora se le niega; y, entre tanto que esto se ve, tenedle recluso en vuestra posada, señor compadre”
Estas son las frases más subrayadas por los lectores en Don Quijote de la Mancha, aunque como ya a buen seguro imaginabas sólo son datos de lectores que disfrutan de la obra de lectores en el Kindle de Amazon.

Lo comparto porque me perce de interes para todos los lectores de El Quijote

martes, 15 de septiembre de 2015

LOS TRES LIBROS MAS PELIGROSOS DE LA HISTORIA

LOS LIBROS MÁS PELIGROSOS DE LA HISTORIA
1. Libro de papel tapiz. 

 En la universidad de Michigan hubo un inteligente estudiante quien decidió investigar sobre los efectos negativos que tenía el arsénico en las personas, por el preocupante dato de que el papel tapiz de las casas, contenía del mismo y que estaba causando que las personas se enfermen o incluso mueran. Para confirmarlo, recolectó muestras del papel tapiz que se creía contaminado e hizo con las muestras un libro el cual, terminó conteniendo tanto arsénico que era mortal estar simplemente expuesto ante él. Hoy en día el libro se encuentra guardado bajo llave en la biblioteca de laUniversidad de Michigan y sus páginas están encapsuladas para que nadie sufra daño al ponerse en contacto con el mismo.

2. Necronomicón. 

 Este libro, el cual fue citado por el famoso Lovecraft, cerca del año 1700, tiene en sus páginas cientos de ritos, rituales y formas de invocar al demonio los cuales según se dicen, son rituales tan poderosos que llevados a cabo por manos equivocadas podrían representar incluso la destrucción de la humanidad. Lo cierto es que hay mucho misterio rondando a este libro el cual se cree está maldito puesto que muchas de las personas que han querido ponerle las manos encima han muerto.

3. El coleccionista. 


Este es uno de los casos en el cual el escritor tal vez desconoce el gran impacto que pueden causar sus palabras sobre sus lectores o que tanto pueden afectarlos psicológicamente.  Este libro cuenta la historia de un psicópata quien decide secuestrar a una joven solo por el placer de hacerlo y la lleva a una cabaña oculta en el bosque en donde planea llevar a cabo con ella algunos experimentos con el fin de añadirla a una extraña colección de libros que poseía. En sí no es la historia o el libro lo peligroso, sino que muchísimos homicidas se hayan basado en la historia o la hayan usado como inspiración para cometer todo tipo de asesinatos y torturas. Hubo incluso un hombre quien asesinó a siete mujeres y confesó haberse sentido influenciado por el libro El coleccionista, de John Fowles.


jueves, 10 de septiembre de 2015

LOS 35 LIBROS QUE DEBES LEER EN TU VIDA


La revista Time ha elaborado una lista con los 35 libros que toda persona debe leer a lo largo de su vida. En esta colección aparecen títulos de todas las naturalezas, desde libros infantiles a obras de ciencia ficción, pasando por libros más técnicos sobre materias concretas.
1- Zen y el arte del mantenimiento de la motocicleta, de Robert M. Pirsig y Renato Valenzuela Molina.
La obra relata el viaje en motocicleta de un padre y un hijo por las carreteras estadounidense. Durante esta aventura, los dos personajes descubren la forma de conciliar el arte con la racionalidad del universo.
2- La colina de Watership, de Richard Adams.
Este libro relata la historia de Quinto, un conejo con visiones apocalípticas que lidera a varios compañeros de madriguera en una aventura que les llevará a conocer un nuevo mundo.
3- La última lección, de Randy Pausch y Jeffrey Zaslow.
Esta obra invita a la reflexión de los lectores. Parte de la petición de que se planteen su vida para que sean capaces de determinar qué es lo que más les importa en la vida.
4- Una breve historia de casi todo, de Bill Bryson.
El autor de esta gran obra trata de abordar una gran cantidad de temas desde un punto de vista en que los hace comprensibles para el público general. De esta forma, Bryson acerca a las personas materias como la geología, la química o la física.
5- El hombre en busca de sentido, de Viktor Emil Frankl.
El prestigioso psiquiatra el doctor Frankl analiza las respuestas que le dan sus pacientes a la pregunta de por qué no se suicidan. De estas conclusiones, Frankl ha creado la idea y técnica de logoterapia.
6- La guerra interminable, de Joe Haldeman.
Esta historia se centra en una lucha eterna entre los hombres y los taurinos que se convierte en una metáfora del papel que cumplen los soldados en el campo de batalla, en donde muchas veces quedan relegados a mera carne de cañón.
7- Cosmos, de Carl Sagan.
Carl Sagan analiza en esta obra la forma en que la civilización y la ciencia avanzan de la mano. El escritor aprovecha este punto de vista para abordar también los avances del ser humano en el espacio.
8- Bartleby, el escribiente, de Herman Melville.
Este libro, un clásico del siglo XIX, narra la historia y los misterios que rodean a un escribiente de Wall Street que, de la noche a la mañana deja de escribir amparado en el lema “Preferiría no hacerlo”.
9- Maus, relato de un superviviente, de Art Spiegelman.
Spiegelman cuenta la historia de dos ratones que quedan divididos en un momento convulso. El relato contiene grandes dosis de sufrimiento, humor y un lenguaje cautivador.
10- Por quién doblan las campanas, de Ernest Hemingway.
El ganador del Premio Nobel de Literatura se pone en la piel de un combatiente en las Brigadas Internacionales en la Guerra Civil española que tiene que volar un puente estratégico cerca de Segovia. Durante esta misión, encontrará el amor y a una serie de personas que le harán ver la vida de otra manera.
11- Kafka en la orilla, de Haruki Murakami.
Murakami cuenta la historia de Kafka Tamura en un relato en el que pasado y presente se fusionan de una manera única.
12- El principito, de Antoine de Saint-Exupéry.
El principito es una de las obras cumbre de la literatura universal. Esta obra conjuga a la perfección valores como la lucha, la valentía o el heroísmo en un mundo en el que estos principios tienen un significado especial.
13- La carretera, de Cormac McCarthy.
Esta obra fue reconocida con el Premio Pulitzer de 2007. Se construye como una fábula que se aventura en el futuro del ser humano utilizando como pretexto un holocausto nuclear y las carreteras de Estados Unidos.
14- Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez.
‘Cien años de soledad’ se ha erigido como una de las grandes obras del siglo XX. En esta historia, García Márquez da vida a la familia Buendía y relata su mágica historia por las calles de Macondo, ciudad fundada por el patriarca de la estirpe.
15- Al este del Edén, de John Steinbeck.
Esta novela, que recientemente ha cumplido medio siglo de historia, relata la vida de una familia en el valle estadounidense de Salinas durante el periodo de tiempo comprendido entre la Guerra de Secesión y la Primera Guerra Mundial. La obra se aventura en la vida cotidiana de la familia Trask y los acontecimientos que les rodean.
16- Cómo ganar amigos e influir sobre las personas, de Dale Carnegie.
17- Crimen y castigo, de Fyodor Dostoyevsky.
18- Los hermanos Karamazov, de Fyodor Dostoyevsky.
19- El extranjero, de Albert Camus.
20- Duna, de Frank Herbert.
21- El cuento de la criada, de Margaret Atwood.
22- Ana de las tejas verdes, de L.M. Montgomery.
23- Fahrenheit 451, de Ray Bradbury.
24- El árbol generoso, de Shel Silverstein.
25- Matar a un ruiseñor, de Harper Lee.
26- Rebelión en la granja, de George Orwell.
27- Sin novedad en el frente, de Erich Maria Remarque.
28- El conde de Montecristo, de Alexandre Dumas.
29- Blade Runner: ¿sueñan los androides con ovejas eléctricas?, de Philip K. Dick.
30- Catch-22, de Joseph Heller.
31- Matadero Cinco, de Kurt Vonnegut.
32- Guía del autoestopista galáctico, de Douglas Adams.
33- Un mundo feliz, de Aldous Huxley.
34- Flores para Algernon, de Daniel Keyes.
35- 1984, de George Orwell.
Fuente: bolsamania.com